2.04.2009

Bang


Antes que sonara de nuevo el chillido del viento
aviolentado por la aceleración de un pedazo de vida,
impulsada por una explosión nanometrica,
dentro del cañon,
la bala y el carrete no alcanzaban a decirse adios.

1 comentario:

Great Value dijo...

y la bala se puso triste jajaja