8.27.2008

Silencio


Dicen que amar es hacer ruido. La chica del climax tenía pronosticada una gran tormenta y no hubo mas que silencio. Silencio de ese que, como diría el payaso, es como el silencio de cuando alguien se desangra. Una hemorragia de silencio.


Cuando baje por fin del tren había manos extrañas que me alimentaban. Alguien me empujó pero el hambre no me dejo sentir nada. Escuche: Fuera Luces. Fuera ropa. Me encontre en el escenario desnudo y ridiculo, frente a una estupida silla de madera. Le grite, le bese, le patié. Escuche aplausos. Y querían mas. Pero yo no tenía más. Yo nunca tuve nada.


Dicen que amar es hacer ruido, pero yo olvide ya las palabras. Y lo unico que salió de mi fue el gruñido de una tripa. Entonces supuse que mis entrañas amaban mas que yo. Y lo mas parecido al amor que encontre fue mi risa, molesta como odiosa.


Que alguien me diga pues, si amar tambien es cagarse de la risa. Porque entonces, solo entonces amo. Y por primera vez, y lo demas habra sido solo dolor, como cura de dolor, que a su vez fue la cura del dolor anterior.


Que alguien me quite entonces estos sueños mudos y torpes. Que alguien me golpeé con un martillo en las encías. Que alguien me grite, que alguien me roce.


Musica para siniestros


2.00 en punto, al medio día. Telefono: 01 800 500 1500. Despues de un largo, larguisimo tramite burocratico deciden enviarme una grua.

La historia es larga y simpatica. Yo no tengo dinero, ni comida en mi refrigerador. Traigo conmigo algunos pendientes de la oficina, pero pienso "Que va, puedo hacerlos por la tarde. Ire a asaltar la cocina de mi madre." Lo pensé asi, con rima y todo. Así que tomo el puente de los arcos del "milenio" (y yo no se si se llaman asi porque es el tiempo que se tardarán en terminarlos, pero en fin) y hay mucho trafico, a lo lejos veo un joven que esta haciendo señales para que nos movamos de carril, su combi se quedó en la subida.

"Pobre" dije, cuando pase por su lado, meti el clutch... tercera. Entonces la camioneta empieza como a renegar, baja la velocidad, yo no se que pasa. Entonces se apaga a escasos siete metros de la combi estacionada. "Mal pinche dita Sea !" dos palabras que continuamente pasan por mi cabeza.

El motor esta apagado y es inutil, no podre nunca hacerlo entender. Muy solidaria salio mi camioneta, se quedo también ahí. Telefoneo a la oficina, y yo, que se de autos lo mismo que un ruso sabe de hacer pozole, me quise hacer el que tenía todo bajo control y entre risas, le digo al joven de la oficina que antes manejaba la camioneta "Puta! se desclocho el acelerador!"...Lo unico que salió de su boca fueron risas y entre lineas un "Estas pero que revientas de pendejo". Cuelgo el telefono, él ya viene para aca.

Es en esta parte donde llamo a "siniestros", lo mio, no se exactamente porque pero, era un siniestro. Total que quedan en llamarme dentro de quince minutos.

Para este momento, ya me había gritado, abucheado y todo el protocolo del siempre culpable ingenuo e inverbe muchacho que ha olvidado echarle gasolina a su auto. Pero ese no era mi caso, yo acababa de echarle pesadisimos doscientos pesos. No sabía nada de lo que estaba pasando. Entonces voy con el muchacho de la combi, que me ayuda a acomodar mi camioneta. Y pues ya, el vuelve a su puesto de aviso.

Aqui entra el morbo comun, porque cada auto que pasaba se detenía, aunque fuera solo un poco, como a revisar los dos autos para ver el golpe. Golpe por supuesto inexistente.

No pasó mucho tiempo para que llegaran por le muchacho de la combi y aqui comenzo mi verdadero calvario. Yo ya no sabia que hacer, no tenía un trapo rojo para irme a avisalre a la gente que se movieran de carril. Mi camioneta estaba a mitad del puente que comunica la zona industrial, con el mercado de abastos, con la zona habitacional y las oficinas. Yo veía autos, y autos y más autos. El culpable, por supuesto era yo.

Como yo sentía ya haber cumplido con lo establecido, me metí en la camioneta y recorde que venía escuchando " Drawn in my own tears" de Jeff Buckley. Aqui hago un parentesis.

(Hace no mas de dos meses, quiza si un poco mas. Eran las doce cuarenta y cinco de la noche. En la ciudad en la que vivo dejan de vender cerveza a la una de la mañana, es decir, a quince minutos de la hora en la que me encuentro. Termino de mandarle un mail a una buena ex novia, estoy evidentemente no en muy sano juicio. Mucho muy. Entonces le digo al siempre trizte Josemaría "Ey, faltan quince minutos para la una, quieres una cahuama? " El como siempre, responde que si. Y salimos en mi camioneta. Es tarde, faltan cinco minutos. Yo, en aquella ocasión voy escuchando "What will you say" del "Mistery White Boy", de por supuesto, Jeff Buckley. Ibamos rapido, es un hecho. No contare como pero acabamos en un arbol, despues de haber golpeado dos postes, roto un cadena y golpeado mi boca contra el volante. Josemaría tenía sangre en los codos y estaba euforico, yo tenía un moretón que descubrí días despues y solo dije "Me quiero morir", eso no hizo sentir nada bien a mi compañero de siniestro. Nos tranquilizamos, llamamos al seguro, tire los envases de cahuamas, que fue un error, porque desperte al vigilante del coto que quería cobrarme hasta la barrida de la banqueta. En fin, como no tenía nada que hacer y "What will you say" es la ´ltima canción del disco, el Disco siguiente fue "Blonde on Blonde" y pues me avente "Visions of johana", "Pledging my Time", "Sooner or Later", "Leopardskin Pillbox hat"... uno de los mejores, si se puede decir sin ofender. Acto seguido, el "Bringing it all back home" de los favoritos y pues ya sabes "Maggie's Farm", "She belongs to me", "Don't Think Twice", etc. ese si podría decir el mejor. Pero no lo hare. Y despues seguía el "Freewheelin". Pero en fin entre gruas, sirenas, ahogados y otras cosas. Llegue a mi casa a las seis de la mañana, y a esa hora ya podía comprar cerveza. Misión cumplida.)


Recordé la extraña conicidencia con cierto cariño. Ridiculo cariño, como todo cariño. Entonces, me di cuenta que tampoco podía llamar a nadie. Porque como es de suponer soy de bien pocos amigos, y pues nada, no creía que a nadie le fuera interesar saber que estaba siendo el hombre mas odiado de la ciudad. No era una novedad pues.


Puse mi mp3 de Bob Dylan, esta vez sería algo mas para el relajo, empezé con "Like a Rolling Stone" así como a manera de tributo. Saqué mi libro de Cortázar y me senté en el camellón, pero no tarde en descubrir que no era la mejor de las ideas, la gente como que gritaba mas euforica al ver que el idiota ese, pues simplemente no estaba haciendo nada, como que se paró a disfrutar de la vista (había una hermosa vista by the way).


Ya. Deje mi libro y llame a Melisa, igual a ella tampoco le importaba, pero se reiría, y yo con ella. Yo de por si ya me divertía demasiado. Así fue, una excelente distracción que me duró nueve minutos veintidos segundos, y la gente como que tenía un poco mas de respeto, como que algo les hacía pensar que hablaba con un mecanico, al seguro, al presidente de la Republica, a mi madre, que se yo. El plan pues tampoco era tan bueno porque yo estaba risa y risa, y a la gente en general le molesta que alguien se tome sus propios problemas a la ligera. Mi padre solía decir "del suelo no pasas", en esta ocasión era evidente que no aplicaba porque pues estaba en un puente y en una ciudad tan golpeada por el estrés no me extrañaría ver a alguien bajarse de su coche agarrarme del cuello de la camisa y de la presilla del pantalón y demostrarme que existen varios niveles en el suelo, yo iba a terminar en el de abajo del puente.


Colgué. Bob Dylan seguía cantando. "She fakes just like a woman, she makes love just like a woman, but she brakes just like a little girl" ah pero que bien me hacía sentir! es mi musica de siniestros, de desgracias digo yo, solo tengo que marcar 01-800-dylan-whisky y se acabo. Tarde nublada, camioneta descompuesta, gente gritandome despectivamente, esperando la llamada de algun desconocido que me diría los muchos tramites que necesitaba hacer antes de que llegara la ayuda. Pero la ayuda ya estaba ahí.


Igual colgue, como dije, con melisa, pero el telefono seguía pegado en mi oreja y yo le cantaba al frio metal, a los circuitos..."If you see her say hello... she may think that i've forgotten her but don't tell her it isn't so".

8.05.2008

House (Diferencial)

Sintomas:

Dolor de cabeza.
Sangre en las uñas.
Pedazos de piel en los dientes.
"Christmas Card from a Hooker in Minneapolis" de Tom Waits
Movimiento inconciente e incotrolable de piernas.
Cortes violentos en el cabello.
Mirada de labrador.
Ojos rojos.
Dolor de piernas.
Mocos.
Repulsion.
Apatía.

Diagnostico:

Poco dinero.
Poca verguenza.
Poco cariño.
Exceso de Robert Zimmerman.
Mucha distancia.
Exceso de picante.

Remedio:

Ninguno.
Resignación.
Mas Tom Waits, menos Sinatra.
Mas cafe, menos agua.
Mas whisky, menos cerveza.
Mas tabaco, mucho tabaco.
Menos pornografía.
Operación de corneas.
Un buen peluquero.
Un gato. (otro)
Un calendario, un reloj y una brujula.
Mucha agua y poca sal.

8.01.2008

Llegadas Nacionales


Y aunque en teoría yo fui a recoger a alguien que venía de Los Angeles, su vuelo había salido de Tijuana. Una vez más en espera y recordé inevitablemente las últimas vecez que había estado allí y otras cuantas ocasiones en las que debí estar y no estuve.

Recordé la maquina de escribir congelada. Recordé mis dedos rojos despues de escribir algunas veces mi nombre. Irracionalmente reviví la navidad como una pelicula de Wes Anderson.
Pero veía a toda esa gente y me tranquilizaba, olvidé que Pauline seguía en la playa y que Cristina seguiría en alguna carretera indiscutiblemente, manejando algún auto robado o eso quisiera, ella ni si quiera necesita robar uno. Nadie necesita robar un auto.

Me parece casi un crimen que ya no permitan que la gente fume dentro de los aeropuertos, lamento lo mal que puede llegar a sonar esto, pero si soy bien de la idea de que si fumar es causa de cancer, no fumar es causa de rabia. Y podría apostar que la rabia ha matado mas gente en la Historia Universal, que cualquier eficema pulmonar.

Si algo me hace recordar que hago en ese bucolico lugar es recobrar el supuesto entendimiento y darme cuenta que estoy mirando un poste grandisimo, sorprendentemente alto, un rascacielos de alumbrado para estacionamiento. Frio metal pintado de un gris espeluznantemente gris, que era observado, creo que por absolutamente nadie excepto yo a traves de un ventanal de dimensiones igualmente ridiculas, pero necesarias.



[Es ridiculo. Lo se. Pero es necesario.]


Herencia del Pasado Siglo.>

Y entonces vuelven a mi las veces y por ejemplo, casi lo primero es haber dejado ir al midwest de Estados Unidos a la psicopata aquella que sabía beber, ignorando al mundo entero cuando me decía con su acento sumamente Britanico "Now you have found her, so go and get her". Pura maldita basura. He corrido demasiado ya. Tengo dolor de pies. Y despues mi abuela de quien he hablado ya, regreso en una cajita hecha polvo y francamente no entiendo a la perfección porque me da risa, pero entiendo menos que a Melisa le de risa, y que riamos tantisimo. Yo culpo a las cervezas. Y mi madre, como olvidar a mi madre, si en aquella ocasión estaba tan ancioso de que llegara que llego detras de una jovencita delgada y guapa, que pensaba "incluso ire a ayudarles a las dos con sus maletas, pero si ya no puedo con las de mi mamá lo voy a sentir mucho". Jovenes arquitectos, ingenieros, abogados y demás seres relacionados directamente con mi trabajo. Y me paro con mi letrero que incluye un nombre, y el nombre de una empresa. Francamente nunca ha sido necesario, pero me he muerto de ganas de hacerlo.

Los aeropuertos son lo mas parecido que existe a los panteones. Estan tan llenos de ese sentimentalismo forzado que mas influenciado por la novela y la bulimia, que por cualquier otra cosa. Si soy bien sincero no se cual se una buena excusa para llorar. Yo nunca batallo para encontrar una, mas que cuando batallo para encontrar un trago. Quiza quise decir a los funerales. Quiza ni quise decir nada, mas que estaba ahi mirando a una señorita que me veía con el ceño mas fruncido del mundo. Y en mi pod empezó la canción. Ya sabes cual. La de la peli. La del cover de khalimba (ni se como se escribe su maldito nombre). Esa, la del damian arroz. Estoy a punto de quitarla, cuando dije "porque no?" me pareció que sería deivertido. Y me diverti. Al final me acerque a la señorita, nunca había conocido a nadie en un aeropuerto y no recuerdo muy bien si eso ya sucedió. Yo creo no. Si tiene usted oportunidad no la deje pasar, es igual de romantico que morir de toxoplasmosis por culpa del gato con el que te embauco tu examante. Conozcase a usted mismo en un aeropuerto, vera lo bien simpatico que es.