10.27.2008

Estoy seguro que había un titulo.


Eran balas de algodón.
Nadie las escuchó precipitarse contra los cuerpos desnudos y tiesos.
El mundo estaba muy ocupado hablando de sus nuevas monedas.
De sus nuevos problemas, que no existen aún, o peor si quieren, que han existido siempre.
Balas en manos de niños.
Niños en manos de hombres.
Hombres sin manos, ni hermanos.
Manos sin hombres que hagan, que piensen, que rían, que se quejen.
Que se mueran.
Que me muera yo.
Que te mueras tu más que yo.
Y ella.
Su sentido de colectividad.
Mi insensible, siempre ebria, hilaridad.
La ira.
La hora.
La era.
La fue.
La fé.
Y ella.
Un poco más.
De beber es de lo que hablo.
Del deber he dicho.
De entender y defender los entendidos.
De ofender a los que lo merecen.
Y los que sobren ignorarlos.
Como la vanagloria.
Como toda gloria.
Como golosina.
Comatoso.
Coma toso.
, cof!
es de relieve.
Como irrelevante.
Ceno irreverente esta noche.
Mañana el desayuno lo es el dolor de cabeza, un par de pastillas rojas y un café con hielos.

5 comentarios:

R dijo...

... como toda la banda a la van de Gloria, como todos los conejos de la luna despiertos diciéndonos que sólo son manchas y que no los persigue ningún coyote ni están dentro de ningún sombrero, ni uno solo.. de lo que podrías darte cuenta José, si cada vez que te encuentras ebrio te dijeras "no estoy ebrio, estoy relajao",y si te llamaras José.

frantic in the forms dijo...

y a ti,¿cuando te veré frito?

Anónimo dijo...

capullos de algodón de azúcar color verde.. yo tmb tomo café con hielos pero mañana desayuno tres horas del renacimiento, dos litros de agua y cien vueltas al baño. Un beso

Camila Mardones dijo...

Te diviertes te diviertes

yo te quiero, te quiero.

MffN MaN dijo...

me alegra que no hayas cambiado tanto en éste tiempo, todavía encuentras las pastillas rojas divertidas y buscas palabras que se parezcan.

Ah y yo también voy a rezar por tí, espero tu mamá esté bien.