11.09.2006

Meopía

A partir de hace exactamente 79 horas me convertí en otro ser humano. Eso, por supuesto, hablando solo metaforicamente. Ahora existe entre el mudno y mis ojos un velo semitransparente a manera de cristal. Una ventana. Un vitral. Una vitrina de catedral. Mis ojos son un par de juguetes siempre vistos y a la venta, tanto como a la expectativa. Siempre abiertos a ser atravesados por cualquier impresión. Disposición. 2.25 en el ojo izquierdo y 2.50 en el derecho. Casi ceguera.
Hoy me sorprendí frente al espejo revisandome el pellejo, todo yo, mas claro, mas feo. Hoy sorprendí al sol, por ejemplo, escondiendose tras unas nubes, dibujandolas, imprimiendo un amanecer desquehacerado y fascinante. Hoy sorprendí a un par de pájaros atrapandose entre las ramas, haciendose daño y cantando canciones de amor, siempre había creido que las hojas lloraban, que las ramas tosían. Hoy sorprendí a una madre regañando cariñosamente a su hijo por no cruzar la avenida prudentemente, quizá hubiera creido que no le quería, hoy le sorprendí en la mirada un miedo tremendo a perderle. Hoy sorprendí a una mujer encantadora esperando el autobus. Antes hubiera creido que me pretendía, hoy la descubrí creyendo que yo era un tipo interesante. Hoy sorprendí a un puñado de automovilistas preodupados por llegar temprano a sus trabajos. antes, hubiera creido que no tenían mas intención que ponerme de mal humor (tarea, no por nada, sencilla) hoy aprendí que procuran no perder el empleo que les remunera lo justo para mantener a sus familias. Hoy me sorprendí preocupandome por un montón de cosas que no tienen solución, y por otro montón cuya solución no está en mis manos. Hoy sorprendía la luna levantandose temprano, sufriendo de insomnio y haciendome compaía. Hoy sorprendí un par de ideas nuevas que nunca se me habían ocurrido, al menos nunca con el brillo de un reflejo como este. Hoy atrapé un montón de libros, que antes no me llamaban la atención. Que eran borrosos y complicados. Hoy visite un montón de besos, todos nuevos, de diferentes sabores. Hoy abrazé un montón de gente con mis ojos, que antes no eran mas que bultos y cabezas, a veces bocas, a veces pies, a veces solo manos. Hoy todos ellos llenos de almas, todas de colores, todas llenas de vida. Hoy aprendí que mi cabello no es tan oscuro, y mi edad no tan adecuada. Hoy descubrí un elevador que lleva al cielo, que siempre creí que era un columpio. Hoy dscubrí la pureza, que siempre creí que eran niños. Hoy descubrí mi cabeza entre mis manos, despues de una emoción incontenible. Hoy descubrí la paciencia del humo en un cigarro y me entretuve un rato imaginandome los carros como naves espaciales, subiendo a las estrellas, sin cascos. Sin cervezas.
Asi es la vida a traves del filtro. Hoy tengo gafas nuevas. Ayer casi las destruyo, porque me gusta la vida trizte, me gusta la vida a ciegas. No me culpo, ni soy culpable, simplemente es la naturaleza. ¿Quien no prefiere (y que levante la mano) creer el mundo ajustado a sus propias necesidades? ¿Quien no aseguraría que el mundo es como uno lo imagina? Pero la misma realidad es muy rica, va mas allá de objetos y de formas gruesas y pesadas, esta mas allá de la física y de la química.
Aún asi, cada uno va obteniendo gafas a cada paso en la vida. Y asi aprendemos a ver las cosas, las mismas quizá, pero cada quien a su estilo. Las gafas del amor, llevelas hoy. Solo hoy las tenemos por la modica cantidad de un beso y unas lindas ganas de cambiar el mundo.
A partir de hace exactamente 79 horas y 26 minutos me cnovertí en otro ser humano: un cuatroojos, sincabeza, diezyseismanos y milcorazones.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo una vez leei algo como eso en un libro de introduccion al cotorreo... eso de las gafas... asi interesante.

Te quiero markius....!!!

Todo yo... asi.

Meny.

Anónimo dijo...

es curioso... tenemos exactamente la misma graduación, y sin embargo, la historia q nos contamos acerca de la misma realidad es tan distinta y tan igual, desde el punto de vista (ironicamente) de la tan desgastada y choteada narrativa de la psicosis y la neurosis que alimentamos dia a dia con inmenso fervor todos los seres humanos.

no soy tan poetica como tu pero creo en lo que escribo y me gusta como escribes. felicidades hermano.

cuidate